Más Información
Hidalgo, aunque poco conocido por su tradición vinícola, alberga un rincón enológico único que celebra la riqueza de su tierra: el viñedo Tierra y Almas.
Ubicado en el municipio de Tecozautla, este viñedo invita a los visitantes a una experiencia que combina el arte del vino con la esencia de la cultura otomí, ofreciendo un espacio ideal para descubrir los sabores y aromas de esta región hidalguense.
En el Valle del Mezquital, Tierra y Almas se erige rodeado de un paisaje semidesértico característico y es alimentado por la tradición ancestral del Xita Corpus, un ritual otomí que honra la conexión entre el cielo, la tierra y el espíritu humano.
Con esta herencia cultural como pilar, el viñedo se dedica a ofrecer una vivencia completa que mezcla la enología con la gastronomía local, basada en ingredientes frescos y de temporada provenientes de sus propios huertos.
Entre sus vinos, Tierra y Almas destaca con sus cepas Malbec, su espumoso Macabeu Xarel-lo, un gran reserva de Cabernet Sauvignon y un delicado rosado de Syrah y Malbec, todos con notas que exaltan los matices de la tierra hidalguense.
Además, el Museo del Vino en sus instalaciones permite a los visitantes sumergirse en el mundo de la viticultura, explorando desde el proceso de elaboración hasta el perfil aromático y el colorido de los vinos en un entorno artístico que resalta el encanto de cada copa.
El restaurante del viñedo se suma a esta experiencia con una propuesta culinaria que enaltece la gastronomía regional. Platos como los sopecitos cubiertos de escamoles dorados en mantequilla, o el filete de res en costra de cenizas de chile acompañado de un puré de camote, son solo algunas de las delicias que los visitantes pueden degustar, destacando los sabores auténticos y tradicionales que conectan al comensal con la tierra.
Para quienes deseen visitar este viñedo abre sus puertas jueves y viernes de 1:00 p.m. a 7:00 p.m., sábados de 9:00 a.m. a 7:00 p.m. y domingos de 9:00 a.m. a 6:00 p.m.
Se localiza a unos 15 minutos del centro de Tecozautla y a unas 2 horas de la capital hidalguense, ofreciendo un refugio ideal para aquellos que buscan momentos de tranquilidad en compañía de buen vino y buena compañía.
Te puede interesar: Apan celebra su Festival Gastronómico 2024 con el sabor de la tradición