Si bien aún no se ha emitido una alerta sanitaria por el incremento de chinches en espacios públicos de la Ciudad de México, este tipo de insectos representan un problema para la salud de las personas.
Son huéspedes en los hogares: se alojan en sitios con poca luz, como camas, muebles, armarios, alfombras y hasta en las mascotas. La visita no viene en vano, pues se alimentan de sangre.
Una picadura puede desencadenar molestias como picazón, fiebre y otras enfermedades que transmiten debido a que son portadoras del parásito Trypanosoma cruzi, causante del malestar de Chagas.
Las chinches han sido una plaga durante mucho tiempo. Por ello, en caso de una infestación es fundamental exterminarla antes de que se asiente o propague.
¿Por qué aparecen las chinches?
Una vez que llegan y se instalan, difícilmente pueden ser echadas de su nuevo hogar. Algunas señales que indican la presencia de estos huéspedes son:
• Manchas color óxido o rojizas en las sábanas o el colchón
• Manchas oscuras de excremento de chinches
• Huevos y cáscaras diminutos de color amarillo claro
• Chinches vivas
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) detalla en su sitio web que las chinches pueden ser muy resistentes, pues son capaces de sobrevivir varios meses hasta un año sin alimentarse.
Lo peor de todo es que tener chinches en casa- o en cualquier otro espacio- se asocia con la idea de mala higiene. Si bien la suciedad es uno de los factores que promueve su aparición, ya que les permite conseguir alimento con mayor facilidad, no sólo aparecen por eso.
Por ejemplo, la falta de limpieza en espacios cerrados o habitaciones, en el colchón, la ropa o la cama sí incrementan las probabilidades de que se alojen en el hogar.
Sin embargo, una persona con buenos hábitos de higiene también puede tener como huéspedes a estos seres diminutos. El departamento de Salud Pública de Madison and Dane, Wisconsin, explica que la mayoría de las plagas de chinches se dan por su rapidez para instalarse de un sitio a otro.
A lo anterior se suma su velocidad para crear nuevas vidas. La EPA puntualiza que las chinches necesitan por lo menos una dosis de sangre cada 14 días para continuar con el apareamiento y la producción de huevos.
Una hembra puede poner de 1 a 3 huevos por día y de 200 a 500 huevos durante su vida toda su vida, que puede durar de entre cuatro y cinco semanas en condiciones favorables.
Consejos para no "enchicharse"
Pese a que especialistas refieren que hay otras razones que promueven la aparición de chinches, lo cierto es que tener buena higiene es una medida preventiva ante la existencia de plagas. Además, se recomienda:
• Inspeccionar con periodicidad los muebles, cama y sillones para verificar que no haya rastros de estos insectos
• Utilizar fundas protectoras para cubrir los colchones y las bases a fin de reducir escondites para el huésped
• Mantener ordenado el hogar