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El ruido de las máquinas que perforan la roca sólida en un túnel a decenas de metros bajo la montaña, hace eco en la bóveda iluminada por enormes lámparas, donde varios trabajadores laboran incansablemente para terminar una de las obras más ambiciosas de la 4T en Hidalgo: la construcción del tramo carretero Real del Monte -Huasca.
La escena pareciera rememorar la historia de Hidalgo, cuando siglos atrás, mineros cavaban las minas para extraer la plata que convirtió en su momento al país en uno de los más ricos del mundo.
Ahora, la misión es distinta y alrededor de 12 empresas nacionales como Coconal, Jaguar, VISE, Proacon, entre otras construyen una carretera, una de las obras de ingeniería civil que dejará el sexenio a la entidad y se estima que quedará lista para marzo de 2024.
El avance estimado hasta ahora es de un 40 por ciento, según revelaron los expertos en la obra. Con un presupuesto de 5 mil 48 millones de pesos, la autopista será de cuatro carriles y comprende tres túneles, seis viaductos, la mayoría elevados, así como pasos a desnivel, pasos para fauna, obras de drenaje, de infraestructura hidráulica y áreas para que las especies bajen a beber. Se prevé que en seis meses se concluirá la autopista a cuatro carriles que será federal.
En un recorrido por los 9.4 kilómetros que comprende la obra de ingeniería civil, una de las más importantes que se desarrollan en el país, Ernesto Jáuregui Asomoza, director general del Centro de Infraestructura Comunicaciones y Transportes (CICT) explica a EL UNIVERSAL HIDALGO que las licitaciones iniciaron en 2022, y se considera la aplicación del recurso hasta 2024, aunque la construcción demorará 15 meses, pues se trabaja desde todos frentes.
Los tres túneles en proceso de construcción, reportan un avance variado. El más grande es el denominado Vicente Guerrero ubicado casi a la mitad de la vialidad, el cual se une con un viaducto elevado construido . (Construido por VISE) que librará el paso de la carretera actual y conectará con último túnel (Omitlán) de 400 metros de largo.
Las medidas de seguridad son estrictas y para salvaguardar la integridad de los trabajadores que cavan dentro de los túneles, un moderno ventilador de aire, mantiene respirable el ambiente en el interior. De los 740 metros de longitud que tendrá este túnel, la perforación ya está en los 320. Y está a cargo de la empresa Proacon, especialista en minería.
El objetivo de conectar a través de túneles, es evitar los grandes cortes de las montañas, pues la geografía es compleja y se afectaría más al medio ambiente, por lo que se optó por un diseño que atraviesa la montaña en su interior. De los seis viaductos, la mayoría elevados, la longitud va de 240 a 125 metros que es el de menor dimensión.
Se proyectaron para librar tanto los cruces con la carretera actual como las salidas de los mismos túneles para evitar construir terraplenes. Coconal es la empresa que construye tres, de seis viaductos y un tramo carretero (en Real del Monte). En uno de los puntos se trabaja a una altura de 60 metros y para ello se diseñó un mecanismo de colocación por deslizamiento de trabes. La empresa VISA por su parte tienen a su cargo tres viaductos más que son los que cruzan la carretera a la altura de Omitlán.
Ernesto Jáuregui Asomoza indicó que son 9.4 kilómetros de longitud el tramo en construcción, pero en desarrollo son cerca de 16 kilómetros porque cada entronque tiene gazas de encauzamiento. Jaguar, empresa contratada para construir el tramo inicial, que se ubica en el actual entronque de Real del Monte, conocido como portal del acceso.
El ingeniero explica que al tratarse de roca maciza que se perfora, en esta área el trabajo es arduo y se realizan algunas voladuras (explosiones) controladas. Con dos frentes en la perforación, se explica que a cada metro que se logra avanzar en el túnel, se va revistiendo la bóveda y se enmalla. La longitud de este primer túnel es de 273 metros e inició su construcción en diciembre pasado, por lo que concluirá a finales de este año. Si bien la construcción de la Real del Monte – entronque Huasca se estimó que demoraría cerca de un año, el personal de las 12 empresas labora en tres turnos sin detenerse, pues las fechas no se han desplazado y van en tiempo.
A decir de Jáuregui Asomoza, algunos procesos de licitación demoraron por la liberación del recurso público, pero se trabaja en tiempo, y ya sólo está pendiente por concursar la instalación de los sistemas inteligentes, el alumbrado, ventilación de túneles y cámaras de videovigilancia, pero en marzo del próximo año, estará concluida la vialidad a cuatro carriles, con tres túneles y seis viaductos.
La nueva autopista es una carretera federal que no será de cuota, pues en 2021 la anterior administración estatal pretendía concesionarla a 30 años, incluso se emitió un concurso público que se adjudicó en abril de 2021 a Grupo Concesionario de México (filial de la empresa Pinfra o Promotora y Operadora de Infraestructura).
Se estimaba un costo sería superior a los 2 mil millones de pesos. De este proyecto que se presentó, finalmente no se llevó a cabo, pues la idea era concesionarlo, y a finales de ese año se resolvió que estaría a cargo exclusivamente del gobierno federal y se transfirió la obra, cuyo principal problema de inicio (antes de 2020) fue la liberación del derecho de vía y en el que el anterior gobierno estatal logró en un primer momento para alcanzar la concesión. El proyecto de la Real del Monte – entronque Huasca es parte de la modernización de la carretera Pachuca Huejutla, que este sexenio llegará hasta Zacualtipán, como lo confirmó el presidente López Obrador en su reciente visita a Huejutla