Los teléfonos celulares que llevaba Janelly, la mujer que se robó a un recién nacido, fueron la clave para que el bebé regresara a casa con su mamá, explicó Francisco Ángel Fernández Hasbun, encargado del despacho de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH).
En entrevista con El Universal Hidalgo, Fernández Hasbun al hacer el relato cronológico de los hechos, deja ver que la mujer, auxiliada por su pareja, solicitó un certificado de nacimiento en un hospital de Mixquiahuala, que se movieron en carro e incluso en transporte público.
Narró desde la sustracción del pequeño hasta que lo hallaron en una bolsa a los pocos minutos de que su captora lo abandonó en la banqueta. Hasta el momento, no hay detenidos, pero Janelly N tiene una orden de aprehensión pendiente, así como una ficha roja de la Interpol.
Primero fueron tecitos y después calditos como Janelly sedó a los familiares para actuar el 25 de enero, cuando se llevó al bebé que apenas tenía tres días de nacido. Enseguida de que los padres se quedaron dormidos en su vivienda de la colonia Renacimiento de Pachuca, ella huyó.
“La nana fue contratada para ayudar a la familia a cuidar al bebé y resulta que les ofrece unos tés, luego unos calditos y los deja adormilados, en esos momentos ella aprovecha y sustrae al menor”.
Al día siguiente, los vecinos avisaron a la Procuraduría de Hidalgo sobre la desaparición y a las tres horas, mediante el rastreo de cámaras, se logró una posible ubicación: el Edomex.
Los videos de seguridad los captaron en un Jetta rojo, después se movieron en transporte público hasta llegar al Edomex, donde Janelly tiene familiares.
“Realizamos varios cateos y no los encontramos, lo que hicimos fue cercar, obviamente con la colaboración del Edomex”.
Las geolocalizaciones se extrajeron de los teléfonos que ella y su pareja tenían consigo, el día que se robaron al bebé, también se llevaron celulares y dinero de la vivienda.
Durante 40 horas, elementos de la PGJEH montaron un operativo alrededor de Valle de Chalco, Solidaridad; ubicación que arrojó los celulares.
Para el 27 de enero, dos días después de la sustracción, la Policía Municipal de Chalco encontró una bolsa negra tirada sobre una banqueta de la colonia La Guadalupana II, al interior estaba el bebé.
Janelly habría sido quien lo abandonó, aunque no actuó sola, de las investigaciones se desprende que presuntamente fue auxiliada por su pareja, quien es policía en Chalco.
Este individuo fue quien pretendía tramitar un certificado de nacimiento en un hospital de Mixquiahuala, situado a 65 kilómetros de Pachuca, donde se robaron al pequeño.
“Con base en el operativo que tuvimos en conjunto con el Edomex, fue lo que a ellos posiblemente les generó un miedo para que soltaran al niño y evitar una responsabilidad, pero los tenemos plenamente identificados”, indicó Fernández Hasbun.