Desde no entregar información a regidores, convocatorias a destiempo para sesiones de cabildo o de querer firmar contratos sin la autorización de la Asamblea Municipal, son algunas de las irregularidades de los alcaldes de Hidalgo desde que iniciaron funciones el pasado 5 de septiembre.
Progreso de Obregón es el municipio más denunciado en cuatro quejas, seguido de Zacualtipán, Tianguistengo, Mineral de la Reforma, Tezontepec de Aldama y Mineral del Monte, con dos casos cada uno, y el resto cuenta con uno.
De acuerdo con el portal de transparencia del Tribunal Electoral de Hidalgo (TEEH), desde el inicio de los nuevos ayuntamientos, regidores han ingresado al menos 45 Juicios para la Protección de los Derechos Político-Electorales, pues acusan falta de transparencia y rendición de cuentas de alcaldes de al menos 25 municipios.
Tan sólo en lo que va del 2025, en siete semanas se cuentan 17 juicios ingresados contra 10 presidentes municipales de Omitlán de Juárez, Xochiatipan, Francisco I. Madero, Apan, Tlaxcoapan, Progreso de Obregón, Tula de Allende, Tulancingo, Mixquiahuala y Villa de Tezontepec.
Antes de concluir el 2024, se denunciaron a más municipios por negar información a sus regidores: Huichapan, Cardonal, Mineral de la Reforma, en dos ocasiones; Zacualtipán, tres denuncias y Tianguistengo, dos casos.
Uno de los motivos más recurrentes por los que denuncian a los alcaldes es porque se les autorizó en los cabildos firmar contratos y convenios sin que tengan que pasar por el voto de los regidores. Este es el caso de Tezontepec de Aldama, Tlanchinol, San Salvador, Mineral de la Reforma, Mineral del Monte, Progreso de Obregón, Tlahuelilpan, Tepeji del Río, Santiago de Anaya, Nopala de Villagrán y Lolotla.
El Universal Hidalgo consultó al diputado Andrés Velázquez Vázquez, presidente de la Junta de Gobierno del Congreso de Hidalgo, quien afirmó que el tema de la transparencia y rendición de cuentas no es un privilegio, por lo que negar información a regidores interfiere en la vida democrática de los cabildos.
Consideró que no se le puede negar la información a la población “porque las instituciones debemos ser proveedoras de información y el uso de recursos se debe transparentar”.
Esta práctica es recurrente en los ayuntamientos; luego, el TEEH les ordena proporcionar la información negada, pero vuelven a incurrir sin que se imponga una sanción mayor. Recordó que los municipios deben rendir cuentas, pues está legislado, y se realizará un exhorto para que faciliten el acceso a la información; “no tenemos nada que ocultar”, señaló. “He recibido a muchos regidores de diferentes fuerzas políticas y expresan inconformidades sobre el actuar de presidentes municipales y vamos a tomar acciones para que los municipios rindan cuentas”, agregó.
El 19 de agosto de 2024, en el Periódico Oficial del Estado de Hidalgo (POEH) se publicó la reforma a la Ley Orgánica Municipal aprobada por la mayoría de diputados de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), con la que ya no será necesaria la mayoría calificada, dos terceras partes del cabildo, para aprobar propuestas. Según la reforma, la mayoría absoluta, el 50 por ciento más uno del cabildo será suficiente para que se aprueben iniciativas presentadas por el alcalde o por la mayoría en el poder.
Con la nueva disposición destaca el presupuesto municipal e incluso la designación de titulares de los Órganos de Internos de Control. La reforma se justificó bajo el supuesto de que al solicitar la mayoría calificada, se afectaba la gobernabilidad y la “voluntad” de la mayoría de la asamblea.
En su momento, el PAN y Movimiento Ciudadano (MC), cuestionaron la reforma y acusaron que tiene el objetivo de disminuir la capacidad política de los partidos; pues afectar la discusión y democracia al interior de los mismos.
Para Noe Paredes Meza, regidor independiente de Tula de Allende y quien ha interpuesto al menos dos denuncias ante el TEEH, señaló que la reforma a la Ley Orgánica Municipal fue un error porque provoca que no haya discusión al interior de los cabildos, que no “haya dinámica parlamentaria que debería ser el revisar, discutir, analizar, sino que es un mayoriteo y se rompe el tema democrático”.
“Se rompe toda dinámica parlamentaria y la democracia que en un ayuntamiento se debería mantener para que el presidente municipal no haga lo que quiera, sino que cumpla la ley y las normas”, explicó Paredes Meza.
Recordó que en administraciones del PAN y PRI, había regidores que estaban en contra del presidente y asistían a los cabildos para votar todo en contra, “también sin analizar y sin revisar, sino simplemente por el hecho de ponerse en contra”.
El regidor consideró que esas malas prácticas han “degenerado” el modelo democrático de una asamblea donde todos los sectores están representados.