Con la transición al IMSS Bienestar, se estima que al menos 3 mil trabajadores contratados por honorarios del sector salud pasarán al nuevo esquema laboral directo. Entre otros cambios que ya experimentan los trabajadores de los primeros hospitales en transitar, entre basificados, homologados y de contrato está el que realizan una actividad acorde con sus estudios, formación profesional y plaza para la cual fueron contratados.
En la entidad son al menos 12 mil trabajadores adscritos a la Secretaría de Salud de Hidalgo, y al menos 9 mil cuenta con una base, pero no en todos los casos corresponde su clave con su formación profesional, tampoco con la actividad desempeñada. Situación que para la mayoría es positiva, pero para algunos representan cambios en sus áreas de trabajo, pero es parte de la revisión al sistema.
Para Martha, enfermera desde años atrás, la preocupación es latente porque cuenta con una plaza que es de otra área, y el cambió podría afectarla, incluso al área de trabajo, pero en su momento es la que estaba disponible.
De acuerdo con la Subdirección General de Prestación de Servicios de la Secretaría de Salud en la entidad, suman diez hospitales (de 22) y 200 centros de salud (de 722) que ya fueron transferidos, tras la firma de convenio en julio pasado entre el Gobierno de Hidalgo y el Gobierno Federal, que es el administrador general.
El Hospital de Cinta Larga, Atlapexco, Metztitlán, Huehuetla, San Bartolo Tutotepec, Actopan y Huasteca son los que ya están bajo el nuevo régimen. El primer hospital que se incorporó fue el regional de Metztitlán, elefante blanco que se rehabilitó para entrar en funciones, que se estima cubrirá la atención médica pública para 266 mil habitantes, pues en la entidad son 2 millones 37 mil los habitantes que carecen de seguridad social, y a quien se les ofrecerá la cobertura.
Datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Pública (Coneval) indican que de 2016 a 2022 la carencia por acceso a los servicios de salud aumentó de manera exponencial, de 14.4 por ciento al 50.4 por ciento, es decir, de 424 mil 400 habitantes a un millón 591 mil 500, es decir más de la mitad de la población, que contaba con el denominado Seguro Popular se quedó en la indefensión para enfrentar una enfermedad, accidente o padecimiento.
El Censo de 2020 reveló que la precariedad en el tema de salud en la entidad y el país afectó a la población durante la pandemia por Covid 19, sobre todo porque tenía que pagar sus medicamentos, la atención médica, clínica, hospitalaria y no se disponía de todas las vacunas, sobre todo para neonatos, condición a la cual si se accedía con el Seguro Popular.
Con poca información disponible para los trabajadores de los Servicios de Salud de Hidalgo, el grueso desconoce aún cómo se llevará a cabo la transición. Sin embargo, el miércoles pasado se llevó a cabo la reunión con la Sección 20 del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud (SNTSa) y los delegados para informar a la base trabajadora.
Pero con tres sindicatos más que actualmente tienen presencia en la entidad y agremian a los trabajadores de la salud locales, la inconformidad se expresó por no ser considerados en la reunión, pues no acudió la representación la Sección 04 del Sindicato de Trabajadores del Sistema Nacional de Salud (STSNS); tampoco los otros dos con presencia estatal.
En opinión de Beatriz Peña Reséndiz, quién se mantiene a la espera de la Toma de Nota local, para asumir el cargo de secretaria general del Sindicato Mexicano de Salud (Simesa) sección Hidalgo, la llegada del IMSS Bienestar es positiva, pues el personal contratado por honorarios tendrá estabilidad laboral.
Con la transición, un trabajador promedio podrá acceder incluso a un aumento del 30 por ciento de sueldo, que es de 3 mil 800 quincenales promedio, además contarán con algunas prestaciones.
Estimaciones del IMSS Bienestar refieren que de los 2 mil 625 médicos adscritos a Servicios de Salud estatal, 973 son especialistas, y se dispone de mil 724 bases para personal médico y enfermeras, principalmente.
En Hidalgo hasta el momento sólo se ha designado a Felipe Arreola como coordinador estatal del IMSS Bienestar, pero se contará con una estructura administrativa, por ser institución que pretende ofrecer seguridad a más de 2 millones de personas. Y hasta antes de que el Gobierno Federal propusiera este nuevo modelo para proveer del servicio de salud de cobertura universal, Fidencio González Fonseca, organizaba el trabajo del modelo de salud creado para no derechohabientes en localidades de alta marginación, y que fue creado desde varias décadas atrás, identificado como IMSS Coplamar décadas atrás.
La proyección del Gobierno Federal es alcanzar una cobertura de 2 millones 036 mil 986 personas que se atenderán en 22 hospitales que cuentan con 802 camas censables. Los centros de salud que se ubican en los distintos municipios son 722 que tienen mil 322 consultorios de atención primaria en los 84 municipios.
De las mil 724 plazas dispuestas para Hidalgo, en noviembre pasado se incorporaron 52 médicos recién egresados de la especialidad a los hospitales de Actopan, Apan, Tulancingo, Tula, Pachuca, Valle del Mezquital y al Materno Infantil, pero se espera la publicación de las convocatorias, pues se prevé que para el 21 de marzo el proceso deberá estar concluido.
El monto estimado para la rehabilitación es de 226 millones de pesos, para equipamiento 477 millones de pesos. En total más de 703 millones de pesos para reconstruir el sistema local público para la salud.