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Por medio de redes sociales, Protección Civil del estado de Hidalgo alertó sobre la aparición de un fenómeno meteorológico conocido como “tornado no-supercelda”, el cual exhortó a la población buscar un refugio.
De acuerdo con los datos de la Subsecretaría de Protección Civil y Gestión de Riesgos de Hidalgo, en agosto de 2014 en el municipio de Almoloya se reportó un tornado de esta magnitud, el cual dejó a su paso daños importantes.
El tornado se detectó el 22 de marzo, por lo cual llamó a la población a estar atenta a los comunicados, además de buscar refugio en un sótano, habitación sin ventanas, permanecer en espacios como el baño, closet, pasillo central o debajo de algo muy resistente.
¿Qué es un tornado no-celda?
El tornado no-celda es un fenómeno natural conocido como tornado no mesociclónico, tornado no supercelda, “tornados no clásicos”, “tornados no asociados a supercélulas”, debido a que suelen presentarse bajo una nube gris o blanca derivada de una tormenta.
Este tipo de tornado se forma de manera diferente, puesto que puede formarse en ambientes combativos más caóticos o menos organizados, como líneas de tormentas o sistemas de tormentas múltiples.
Son una columna de aire que se forma en contacto con la Tierra y una nube, caracterizada por su alta velocidad angular, son pequeños y de una menor intensidad de viento.
¿Cómo se origina un tornado no-celda?
Un tornado no-supercelda pueden formarse en una variedad de situaciones meteorológicas donde haya una combinación de inestabilidad atmosférica, humedad y cambios en el viento a diferentes altitudes que favorezcan la rotación y la convergencia del aire, generalmente están asociados con sistemas de tormentas más caóticos y menos organizados.
- Interacción de frentes: Cuando diferentes frentes atmosféricos, como un frente frío y un frente cálido, interactúan, pueden generar condiciones favorables para la formación de tornados. La convergencia de aire caliente y húmedo con aire frío puede crear una inestabilidad que propicie el desarrollo de tornados.
- Líneas de tormentas: Las líneas de tormentas que se extienden a lo largo de un frente frío pueden producir tornados. Estas líneas de tormentas pueden generar ráfagas de viento ascendente y descendente que propicien la rotación de la atmósfera y la formación de tornados.
- Ondas de gravedad: Las ondas de gravedad, que son perturbaciones en la atmósfera causadas por cambios en la densidad del aire, pueden crear áreas de convergencia y divergencia que favorezcan la formación de tornados.
- Tormentas multicelulares: Las tormentas multicelulares, que consisten en varias células de tormenta individuales, pueden producir tornados cuando las corrientes ascendentes y descendentes dentro de estas tormentas se organizan de manera que generan rotación en la atmósfera.
¿Cómo se diferencia de otros tornados?
La diferencia es su desarrollo, un tornado no-celda se crea a partir de un embudo con forma de cuerda mientras una nube de tormenta crece, por lo que forma torbellinos de escombros. Para su desarrollo intervienen factores como las condiciones atmosféricas, formación y comportamiento.
- Condiciones atmosféricas: Inestabilidad atmosférica, es decir, una masa de aire inestable y cálida cerca de la superficie, cambios bruscos de dirección del viento con la altura, presencia de un frente frío o una línea de tormentas, así como interacción de frentes.
- Formación: Cuando diferentes frentes atmosféricos, como un frente frío y un frente cálido, interactúan, pueden generar condiciones favorables para la formación de tornados. La convergencia de aire caliente y húmedo con aire frío puede crear una inestabilidad que propicie el desarrollo de tornados.
- Comportamiento: Pueden ser más delgados y de menor duración e intensidad que los tornados normales, son más pequeños y tienen una menor intensidad de viento, representan un riesgo significativo y pueden causar daños severos, incluso en zonas rurales.