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El pasado 4 de junio, miles de hidalguenses se congregaron para presenciar la llegada de la legendaria locomotora de vapor Empress 2816, conocida como "La emperatriz 2816".
Esta imponente máquina, fabricada en 1930, culminó un extenso y esperado recorrido que inició el 24 de abril, abarcando Canadá, Estados Unidos y una parte de México.
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Sin embargo, el trayecto de la Emperatriz 2816 no estuvo exento de tragedia. Durante su paso, un momento impactante sacudió a los presentes cuando una mujer perdió la vida al ser golpeada en la cabeza por la locomotora.
La víctima, identificada como Dulce Alondra G.H., de 28 años, se encontraba intentando tomarse una selfie en las inmediaciones de la vía cuando ocurrió el accidente. El hecho generó una reflexión sobre la seguridad y las precauciones necesarias al presenciar el paso de estos gigantes del ferrocarril.
La empresa Canadian Pacific Kansas City (CPKC), operadora de la locomotora, expresó sus condolencias y emitió un llamado a la seguridad.
"Todas las personas que observen el paso del tren deben permanecer siempre al menos a 10 metros de distancia de las vías. Las personas nunca deben pararse cerca ni sobre las vías del tren, intentar subir a los equipos ferroviarios o a cualquier infraestructura ferroviaria. Siempre tengan cuidado cerca de las vías y los trenes", enfatizó la compañía en un comunicado.
Este suceso subraya la importancia de respetar las medidas de seguridad en torno a las vías férreas. La emoción de ver de cerca una pieza histórica como la Empress 2816 debe ir acompañada de una actitud responsable y consciente de los peligros.
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La gira de "El Último Clavo" sigue su curso, y con ella, la esperanza de que la tragedia sirva como un recordatorio para prevenir futuros accidentes.
En memoria de Dulce Alondra G.H., y por la seguridad de todos, es vital que se mantenga una distancia prudente y se sigan las indicaciones de seguridad al presenciar el paso de estas imponentes locomotoras que continúan fascinando a generaciones enteras.
