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De una u otra manera, el mestizaje siempre ha estado presente en la obra del fotógrafo Guillermo Serrano. Reflexionó sobre este tema en su anterior proyecto La culpa es de los tlaxcaltecas y lo hace ahora en Mestizaje manifiesto, la exposición que inaugurará el próximo jueves 7 de marzo a las 14:00 horas en la sala Nacho López de la Fototeca Nacional en Pachuca, Hidalgo.
Sin embargo, mientras en su anterior trabajo aborda el tema en términos históricos, al cuestionar la narrativa oficialista de la conquista de México, en su nueva investigación hace un trabajo introspectivo: se sumerge en el archivo fotográfico familiar y propone una relectura de las imágenes en las que aparecen sus abuelos paternos y maternos.
“Mientras le daba vueltas a la idea del mestizaje, se me reveló que yo tengo una constitución familiar muy particular: por el lado materno, tengo un abuelo negro que estuvo casado con una mujer blanca; y por el paterno, mi abuela era una mujer indígena que se casó con un hombre güero de campo”, explica Serrano (Tlaxcala, 1980), quien ha presentado sus obras en museos de Estados Unidos, España, Hungría y Argentina.
La muestra, que está conformada por una gran instalación de 10 piezas en la que dialogan fotografías y textos, parte de un relato en primera persona que atraviesa la práctica artística de Serrano, sus intereses, y la historia de sus ancestros, la cual inevitablemente influyó en él. “Entendí que quien soy como persona, como profesionista y como fotógrafo, está directamente vinculado a quiénes fueron y son mis abuelos”, menciona.
Así, la vida y obra de sus abuelas y abuelos (y en consecuencia la del propio Serrano) se muestra ante el espectador y de paso pone de manifiesto los estereotipos que persisten en la actualidad. Destaca una pieza en la que el autor creó un diálogo entre las imágenes del archivo familiar con las del archivo de la Fototeca. La idea era cubrir los vacíos visuales que había en las fotos de sus abuelos.
“La exposición apunta a ser congruente respecto a cuál es mi lugar de enunciación. Por eso es que entrelazo aspectos que me constituyen como artista y como persona: ser tlaxcalteca, pertenecer a una familia étnica diversa y formar parte de la cuarta generación de una familia de fotógrafos. Tengo una preocupación constante de saber dónde estoy situado y relacionarlo con cuál es mi práctica artística”.
Al hacer su investigación, que comenzó hace tres años, descubrió aspectos interesantes de sus abuelos. Jacobo, por ejemplo, fue periodista, fotógrafo y empresario (era dueño del periódico Prensa de Tlaxcala). “Tuvo una vida pública, tiene fotos con gobernadores y presidentes, y dejó una huella muy profunda en la familia. Pareciera que su vida fue más importante que la de mi abuela, que siempre ha sido ama de casa”, dice.
Serrano borró esta “desigualdad” al poner a sus cuatro abuelos en un mismo nivel en su formación como persona y de quién es como individuo. Una manera de representar esta idea fue con un retrato que construyó con cuatro imágenes; cada fragmento tiene las mismas dimensiones, dando así igualdad a sus abuelos.
En todas estas historias, ¿cómo está presente la discriminación? Es algo que está implícito, así como la violencia de género o el racismo. En un libro de artista hago la siguiente pregunta: ¿cómo te imaginas a un hombre negro de Tlaxcala?
Repito el ejercicio con mis otros abuelos: ¿cómo se imaginan a un güero, una india o una blanca de Tlaxcala? Es un juego que me interesa hacer con el espectador, porque todos tienen una idea de lo que debería ser.
En México, por ejemplo, un hombre negro está relacionado a la costa de Guerrero o Veracruz. Pero en mi caso, mi abuelo es un hombre negro que toda su vida vivió en la ciudad; en sus fotos siempre viste traje en eventos públicos. Así que no cumple con la imagen estereotípica de un negro.
¿Cómo evocas a tus abuelos? La palabra que me gusta es la de ancestros, siento que tiene la carga sobre el pasado y sobre un linaje, sobre un sentido de pertenencia. Me gusta pensar en esta idea de ancestros, porque de ahí vengo, de cada uno de ellos, de quienes fueron como persona profesional y como cuerpos que se mezclaron.
Mestizaje manifiesto se inaugura el próximo jueves 7 de marzo a las 14:00 horas del día en la sala Nacho López de la Fototeca Nacional, que se ubica en Casasola s/n, Ex Convento de San Francisco altos, Colonia Centro.
