La Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH) hizo observaciones por presuntas irregularidades por un total de 54 millones 721 mil 716 pesos en la instalación y mantenimiento de los lavamanos, que fueron colocados en diferentes municipios de la entidad durante la pandemia del covid-19.
De acuerdo con los resultados de la revisión de la cuenta pública 2022, en primer lugar, el ente fiscalizador detectó deficiencias en el procedimiento de adjudicación de los contratos, debido a que fueron otorgados de manera directa; es decir, sin concurso, bajo el contexto de que se trataba de adquisición de insumos para los servicios de salud ante la emergencia sanitaria por el coronavirus que inició en 2020.
No obstante, los convenios fueron firmados dos años después, por lo que consideró que contaban con tiempo para realizar el procedimiento de licitación pública.
También detectó falta de documentación justificativa por municipio donde se colocaron los 219 lavamanos, así como reportes de cuidado de estos por parte del arrendatario, con un monto pendiente de solventar de 17 millones 259 mil 774.83 pesos.
Entre las observaciones, se señaló la falta de evidencia de suministro de jabón líquido antiséptico, toallas y suministro de agua potable clorada, así como de la supervisión de que hubiera insumos en los módulos. Por este servicio el importe observado es de 37 millones 461 mil 941.28 pesos.
El gobierno estatal gastó al menos 57 millones 196 mil 922 pesos por el arrendamiento y mantenimiento de los módulos de asepsia, durante la administración pasada, de acuerdo con información de 13 contratos de los cuales EL UNIVERSAL HIDALGO posee copia.
Un dato por destacar es que entre las empresas contratadas está es Creaciones, Espectáculos y Producciones de México, cuyo representante legal es Iván Gonzaga Garay, quien a su vez fue gerente de Producciones Autica, otra firma que recibió al menos 137 millones 578 mil 910 pesos en contratos durante los primeros 18 meses de la administración estatal pasada.