Los tanques que llevaron meses de traslado desde Veracruz a la refinería Miguel Hidalgo, ubicada en Tula de Allende y que demandaron incluso quitar puentes peatonales y cierre de vialidades no fueron utilizados en la construcción de la actual Coquizadora, pues no sirvieron para este proyecto.

Así lo informó Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, quien refirió que al tomar las riendas del gobierno federal y conocer de la situación de Petróleos Mexicanos en 2018 encontraron que la refinería de Tula estaba ‘tirada´.


Les platico que la (coquizadora) de Tula la encontramos tirada, la iniciaron y la abandonaron”, y reveló que “tuvo que ver con ese escándalo de Odebrecht”.

“Algunos que viven por allá por Tula, en Hidalgo, pero también San Luis Potosí y Veracruz, se deben de acordar que se trasladaron grandes tanques por la carretera, quitaron puentes para poder pasar, y todos esos tanques los dejaron en la refinería de Tula”, dijo durante la conferencia mañanera de este martes.


En la explicación que dio el mandatario destacó que recuperar el proyecto inicial de la coquizadora que involucraba estos tanques, significaba una inversión de dos mil 500 millones de dólares.


“Tuvimos que decidir: dejar los tanques ahí y todo lo que se había comprado o invertir dos mil dos mil 500 millones de dólares adicionales para tener la planta coquizadora”, detalló y acoto que se tenía que construir porque es fundamental porque la refinería de Salamanca y la de Tula porque producen gasolinas, pero también mucho combustóleo que es necesario procesar.


Destacó que las refinerías se saturan de combustóleo, pero cuesta menos el combustóleo y contamina más que las gasolinas. Entonces, para eso son estas plantas coquizadoras, para convertir el combustóleo en gasolinas, consideró López Obrador.

En su discurso, refirió que se están construyendo dos refinerías más y las dos coquizadoras, la de Tula y Salina Cruz.

Las plantas coquizadoras son para convertir el combustóleo en gasolinas, pero son plantas muy grandes que nos van a permitir tener como 65 mil barriles diarios adicionales de gasolina, una en Tula y otra en Salina Cruz. Son inversiones de alrededor de cinco mil millones de dólares.

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