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En una ciudad donde la seguridad en el transporte público sigue siendo un desafío, una joven conductora decidió marcar la diferencia ofreciendo un servicio exclusivo para mujeres. Inspirada en su propia historia familiar y preocupada por la seguridad de quienes deben trasladarse solas, creó una alternativa de movilidad confiable y personalizada en Pachuca.
"Yo me dedico a dar un servicio de traslados seguros y exclusivos para mujeres. Solo subo mujeres, salvo adolescentes acompañados de sus madres o familias", explicó.
Su proyecto nació en Cancún, donde operaba principalmente en la zona hotelera y el aeropuerto. Sin embargo, al regresar a su ciudad natal, vio la oportunidad de replicarlo con un enfoque más local. "En mi familia tenemos el antecedente de que hace 33 años intentaron secuestrar a mi mamá en un taxi. Siempre ha sido un tabú el transporte público y para mí es importante que todas las chicas lleguen seguras a casa", relató.
Además del traslado privado a cualquier punto de la ciudad, su servicio destaca por la seguridad y confianza que brinda. "No es un coche que tomas en la calle ni alguien a quien le haces la parada. Es una persona que va exclusivamente por ti", subrayó.
Paralelo a este emprendimiento, también imparte clases particulares a niños de primaria y cursa una maestría, combinando su desarrollo profesional con una labor social que busca hacer la diferencia en la movilidad de las mujeres.
Sobre el servicio de taxis en Pachuca, opina que aún falta mejorar en seguridad y calidad. "Hay unidades en mal estado, conductores que manejan a exceso de velocidad y no respetan las normas viales. No solo es un problema de índice delictivo, también de cultura vial", señaló.
En cuanto a la llegada de plataformas como Uber, Didi o Cabify, considera que sería una opción positiva. "Tener alternativas te permite elegir la mejor opción y viajar con mayor tranquilidad. Saber qué unidad abordas, quién es tu conductor y la ruta que tomarán te da seguridad".
Por otro lado, rechaza los estigmas sobre la conducción de las mujeres. "Es parte de una cultura patriarcal. Estadísticamente, quienes tienen más accidentes son los hombres, pero se mantiene la idea errónea de que las mujeres no sabemos manejar", afirmó.
Conducir ha sido parte de su vida desde pequeña y, aunque su sueño frustrado es ser trailera, actualmente se considera una conductora responsable y prudente. "Yo manejo como viejita, extremo precauciones. Para mí, la seguridad es lo más importante", dijo entre risas.
Finalmente, envió un mensaje claro a las mujeres de Pachuca: "Todas tenemos derecho a salir, divertirnos, trabajar y regresar a casa seguras".
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