Una jueza vinculó a proceso a Cristian N, señalado como presunto agresor "Jefazo", el perro que murió tras recibir un machetazo el 5 de agosto en la colonia Minerva de Mineral de la Reforma; sin embargo, el imputado se defendió al mencionar que lo hizo para protegerse del can, quien se estaba tragando a una coneja que tenía como mascota.

Poco después del mediodía del 12 de agosto en los Juzgados Penales de Control, Juicio Oral y Ejecución, se reanudó la audiencia en contra del presunto responsable de la muerte del pitbull, acusado por hechos que la ley sanciona como delitos contra la vida, integridad y dignidad de los animales.

Tras ingresar a la sala de oralidad número seis, la defensa pidió celebrar la audiencia a puerta cerrada con el argumento de que existían amenazas en contra de Cristian N; sin embargo, la jueza Karina Vertiz Marín negó la petición y consideró que no existía riesgo porque el imputado estaba en prisión preventiva.

Posteriormente, Cristian N decidió declarar su versión de los hechos con previo asesoramiento de sus abogados y aún cuando la jueza le advirtió que lo que dijera podría afectarle.

Sentado a un costado de la juzgadora, vestido con pantalón café, playera blanca y tenis sin agujetas, Cristian N indicó que aquel 5 de agosto salió de su casa en compañía de su mamá y sobrina con rumbo al tianguis; al regresar, poco antes del mediodía, dijo que la familia se percató de que la puerta estaba entreabierta.

Al ingresar a la vivienda observó como un perro pitbull sostenía en el hocico a una coneja que era su mascota. En ese momento, aseguró que el can intentó agredirlo y que por ello agarró un machete, para defenderse, así como para proteger a sus familiares.



A pesar del relato y la proyección de siete fotografías del interior de la casa de la Minerva donde ocurrieron los hechos, la jueza consideró que no existieron las características para acreditar la legítima defensa porque el perro no agredió a las personas; además indicó que Cristian N actuó con dolo al usar un machete y no algún otro objeto.

La vinculación no significa que Cristian N es culpable porque continuarán las investigaciones durante un mes más; mientras que Ana Lilia Martínez Hernández, titular de la Unidad Especializada en Delitos contra Animales de la Procuraduría de Hidalgo, adelantó que solicitará la pena máxima de seis años de cárcel.

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