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En los dos primeros meses de este 2024, a través de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), se iniciaron por víctimas residentes en Tulancingo, 91 carpetas de investigación por violencia familiar y 20 más por incumplimiento de asistencia familiar.
De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), el año pasado, Tulancingo cerró con 615 denuncias formales por violencia familiar. Marzo, mayo, julio y septiembre fueron los meses de mayor índice de violencia registrada.
Del 2022 a 2023 hubo un incremento de 16 casos, ya que ese año concluyó con 599 denuncias, mientras que el 2021 terminó con 567 casos.
Las cifras indican que cada año aumentan las denuncias por este delito, aunque se desconoce cuántas de las carpetas iniciadas llegan a una resolución mediante juicios penales o salidas alternas.
En la entidad, durante el 2022 fueron denunciados más de seis mil 929 casos de violencia familiar, de estos, cerca del nueve por ciento corresponden a Tulancingo.
Para este 2024, en Hidalgo ya se contabilizaron 522 casos por violencia a la familia tan solo en enero y para febrero se registraron 577 denuncias, adicionalmente 136 inconformidades por el delito de incumplimiento de obligaciones de asistencia familiar, es decir, al menos 20 casos por día.
La violencia familiar es un fenómeno social que se define como el uso intencionado y repetido de la fuerza física o psicológica para controlar, manipular o atentar en contra de algún integrante de la familia.
El abuso psicológico, físico, sexual o económico que se da entre personas relacionadas afectivamente dentro del hogar que, estadísticamente, su denuncia se encuentra por encima de otros delitos como robos y homicidios.
