El reactor Planta DC 51002 que transitará por los estados de Tamaulipas, San Luis Potosí, Guanajuato, Querétaro, Estado de México y finalmente a la refinería de Tula, pesa cerca de 700 toneladas y es parte del equipo que se instalará en la coquizadora.
Desde finales de año que llegó al Puerto de Altamira, Tamaulipas, el convoy salió y no se detendrá hasta llegar a la refinería Miguel Hidalgo, donde se edifica la coquizadora, el peso promedio del reactor es de 462.5 toneladas más el equipamiento.
Las piezas de cada reactor tienen una dimensión aproximada de una altura de 8.45 metros y cerca de 7 metros de ancho. Sin embargo, las dimensiones son menores a las calderas ya traídas en 2017 para la coquizadora de Tula y que no fueron utilizadas.
Para llegar a Tula, Hidalgo, el convoy tomará la carretera a Ciudad Victoria, para entroncar a la carretera federal 126 y seguir su camino a la federal 80. En San Luis Potosí y en Matehuala transitará sobre la carretera 57.
El equipo de experimentados transportistas recorrerá entidades como Tamaulipas, San Luis Potosí, Guanajuato, Querétaro, Estado de México, y arribará a la refinería de Tula.
Si bien el traslado de las calderas fue suspendido del 2 al 5 de febrero, este martes se reanudará a partir del kilómetro 107 de la carretera federal 101 a la altura del ejido El Sotol, desde donde avanzarán en la próxima semana con dirección a Jaumave, Tamaulipas.
Algunos automovilistas se encuentran inconformes porque señalan que el paso de este equipo de grandes dimensiones, los dejan varados por largas horas para llegar a sus destinos, pues los equipos transitan 15 kilómetros por hora.
Mientras tanto otros aplauden la labor que realiza la 4T y que avanza el desarrollo industrial para la Refinería de Tula.