Continúa el conflicto en la comunidad de Coamila, Huejutla, en donde un grupo de evangélicos que presuntamente se niegan a cooperar con la comunidad, les aplicaron los usos y costumbres, al cercarles con alambre dos de sus domicilios, además de despojarlos de 12 predios.
En días pasados un pastor evangélico y dos de sus feligreses fueron retenidos en la comunidad indígena de Huejutla, por presuntamente no cooperar con la comunidad, por lo que permanecieron dos días privados de su libertad.
Las autoridades de Coamila impusieron una multa económica, cuyo monto se desconoce; sin embargo, el conflicto continuó ya que el día sábado 6 de marzo un grupo de evangélicos acudieron a las oficinas del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) para denunciar el presunto despojo de 12 parcelas y el cercado con alambre de púas de dos domicilios particulares.
El conflicto se agudizó, pues el grupo de personas afectadas acusan que se trata de intolerancia religiosa, por no profesar la misma religión, y consideran que la medida es porque predican la palabra (religiosa) dentro de la comunidad ganando más feligreses que la iglesia católica.
Cabe hacer mención que en la Huasteca, la mayoría de las personas de comunidades profesan la fe católica, pero cada día existen más iglesias protestantes, quienes realizan sus eventos sin exigir cooperación entre la comunidad, como lo hacen otros.
