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La comercialización del pollo en la región de Tulancingo ha disminuido en un 20 por ciento, tras la noticia de que en Hidalgo existe carne contaminada.
En entrevista para El Universal Hidalgo, Carmen Carbajal Domínguez, quien tiene negocios de venta de pollo para consumo, dio a conocer que desde hace 15 días, ha disminuido el número de clientes y sus ventas van a la baja.
Expresó que al menos 15 comerciantes más, ubicados en la Central de Abastos, están padeciendo las consecuencias de la desinformación que circula en redes sociales, dentro y fuera del estado de Hidalgo.
La comerciante pidió a los gobiernos tanto municipales y estatales desmientan la versión de que el consumo de pollo puede enfermar a la población y que está relacionado con la contaminación de carne.
"Quiénes se han acercado a nosotros, nos preguntan con recelo, ¿si no se van a enfermar?. Nos dicen que les digamos la verdad de lo que sabemos; la realidad es que solo nos enteramos por las noticias que las vacas están enfermas y mueren", manifestó.
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Hasta el momento, Carmen Carbajal dijo que varios comerciantes no han recibido información directa de las autoridades de lo que acontece, por lo que sólo presuponen lo que pasa al ver las noticias.
"Yo tengo entendido que se murieron vacas por una enfermedad y que se prohibió la carne de res, pero no el pollo", detalló.
En Tulancingo, pese a la información de las autoridades, continúa circulando audios a través de Whatsapp, donde se especifica que la muerte de ganado vacuno va en incremento, no solo en Metepec, sino también en Tulancingo, lo que ha provocado una desconfianza poblacional en el consumo de carne, sin distinción de especie, pues incluso el pollo lo dejaron de comprar los ciudadanos.
Cabe destacar que la carne de res es la que es investigada y se busca que cuente con los sellos para poder ser consumida, pues al contar con la certificación y ser avalada no se considera riesgosa para su consumo.
