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Habitantes del ejido Tecolotitla retiraron el musgo (sargazo), que crece en el río que cruza frente a la cabecera municipal de Atlapexco con el objetivo de mantener limpio el afluente que lleva poca agua y que abastece a las comunidades circunvecinas.
El río que cruza este municipio es uno de los afluentes que en temporada de Semana Santa son más visitados por los turistas; sin embargo, como todos los ríos de la región Huasteca, este mantiene su nivel crítico en esta temporada de estiaje.
Los comuneros piden de manera atenta a los visitantes cuidar de este espacio tan importante para todos los pobladores. "Recuerden que el agua es vida, conservarla es tarea de todos", señalaron los vecinos, quienes realizan faenas para mantener la limpieza del río, luego de que este ha reducido su caudal.
Otro de los ríos grandes de la huasteca es el Garcés, el cual durante muchos años alimentó a las comunidades pertenecientes a Xochiatipan, en donde incluso se realizan actividades de pesca. Pero ante el saqueo que actualmente se representa del material pétreo la situación ha causado una gran devastación al medio ambiente y poco a poco disminuyó su nivel.
En las últimas semanas, los habitantes y autoridades municipales están desesperados por las altas temperaturas y la falta de agua en la región, pues la sequía que afecta a la mitad del territorio estatal ya genera estragos para solventar la vida cotidiana.
A la orilla de los ríos se han comenzado a cavar pozos artesanales para contar con agua.
En tanto, en la Sierra hidalguense, en el municipio de Chapulhuacán trabajadores del volante salieron a las calles para reforestar sembrando árboles, pero aún no han existido lluvias en esa parte de la sierra y sembrar en esta temporada no tienen los efectos esperados.