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Exalumnos de Francisco Luna Tavera, historiador, escritor, poeta e investigador, se dieron cita este miércoles en el panteón Zaragoza para montar una guardia en honor, en su noveno aniversario luctuoso.
Rogelio Perusquia, director de la Fundación Francisco Luna Tavera, destacó que uno de los grandes aportes del escritor oriundo de Alfajayucan fue la promoción de la cultura Hñähñu en tiempos donde había mucha desinformación sobre los orígenes del pueblo Otomí.
Andrés Solís compartió que entre las labores que realizó Luna Tavera está la dignificación del pueblo Otomí y su gran legado intelectual que sigue vigente hasta la actualidad, sobre todo porque se trata de una cultura milenaria de Mesoamérica.
Compartió que lo conoció en su cumpleaños número 17, y el legado que tuvo del también exalcalde, fue la literatura en lenguas originarias (poesía en Hñähñu).
Por su parte, Xuua Desiderio, quien se dedica al arte popular, compartió que Luna Tavera, siempre investigaba para conocer más a fondo del pueblo Otomí y después transmitirlo. “Me tocó ir con él a algunos cerros para traer tierra. Todos los pigmentos los hacía él con técnicas que había investigado. Se iba por tierra hasta Cadereyta (Querétaro) para realizar un pigmento; a algunos nos enseñó directamente las mezclas para obtener determinados colores”.
Felipe Guarneros Estrada, compartió que la mayor enseñanza que tuvo de Luna Tavera fue su calidad humana, “era un ser humano maravilloso, que siempre trataba de hacer el bien, ayudaba a quien podía, cuidaba la naturaleza y amaba a los animales. Es muy reconocido como historiador y antropólogo”, externó.
Añadió que le enseño a bordar en ayate y recordó que gran parte de las obras que alberga el Museo de la Cultura Hñähñu, ubicado en Ixmiquilpan, son de Luna Tavera. “Pinturas murales, pinturas en piedra; el ayate que está ahí, yo lo hice, pero él me iba enseñando. Fueron dos semanas de no parar”, compartió.
Finalmente, Johny Rodríguez Flores, subdirector de la fundación, expuso que el legado del escritor es grande y aunque no lo conoció, se identifica con su ideología. “Y voy a seguir lo que él tenía para aportar algo a mi cultura, a mi Valle del Mezquital, al Hñähñu”.