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Julio Menchaca Salazar, gobernador de Hidalgo, rechazó el uso de la violencia en la pretendida toma de la Planta Hidalgo de cementos Cruz Azul. Luego de indicar que es un conflicto entre particulares que se resolverá a través del diálogo y entendimiento entre las partes, negando en todo momento la intervención de la fuerza pública para una solución.
El pronunciamiento ocurrió luego de que la mañana de este lunes personas a bordo de autobuses y camionetas procedentes de la Ciudad de México intentaron ingresar a la cementera para tomar las instalaciones.
Sin embargo, el gobernador señaló que “no se va a permitir que la violencia esté siendo utilizada para reclamar un derecho”, ya que recordó que hay juicios vigentes de carácter civil, mercantil y penal que deben resolver las instancias procuradoras de justicia.
Menchaca Salazar refirió que tanto el gobierno estatal como federal tienen interés en que la situación de Cruz Azul se resuelva por los empleos y actividad económica que genera; no obstante, puntualizó nuevamente que el conflicto es entre particulares.
Descartó que hasta el momento exista una resolución definitiva respecto a la posesión de la planta e indicó que lo que se requiere es un ejercicio de conciliación.
Recordó que en ocasiones anteriores la Secretaría de Gobierno de Hidalgo convocó a las partes involucradas a diversas reuniones, pero que uno de los dos grupos no ha sido flexible.
“En una negociación se debe de estar dispuesto a ceder para evitar que esto se alargue por muchos años. Debe de haber voluntad y hay toda la disposición del Estado en torno al caso”.
Respecto a los hechos de este 23 de septiembre, el gobernador explicó que fueron personas contratadas para generar disturbios por lo que tendrán que asumir su responsabilidad, advirtió. Según reportes del Gabinete de Seguridad, 120 fueron detenidos y 180 escaparon.
“Van a tener que asumir su responsabilidad, no pueden estarse utilizando grupo porriles para dirimir problemas que están por resolverse en los juzgados”.
Sobre las clases que se suspendieron por el conflicto, Menchaca Salazar indicó que las autoridades educativas realizarían un monitoreo, pero estimó que a partir de mañana se reanudarían las actividades escolares.
Esta es la cuarta ocasión que intentan tomar por fuerza la planta de Cruz Azul, ya que en abril del año 2022 ocurrió un suceso similar cuando foráneos llegaron a la cementera en camiones, el saldo fue de ocho muertos, once heridos y nueve detenidos.
Al respecto, el gobernador dijo que ese suceso de hace dos años y el que se registró la mañana de este lunes tuvieron mayor difusión, pero que no han sido los únicos.
