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Después de un prolongado proceso burocrático, la familia de Mireya Berenice Pérez Sánchez, joven reportada como desaparecida desde el 25 de mayo de este año, logró finalmente recuperar su cuerpo para velarla y darle sepultura el pasado 12 de julio en la comunidad de Taultla, Tepeji del Río.
Mireya Berenice fue localizada en un terreno baldío en Los Pocitos, en el estado de Michoacán. Sin embargo, su cuerpo presentaba un alto grado de descomposición, lo que impidió a las autoridades determinar la totalidad de los abusos que pudo haber sufrido.
El cuerpo de la joven fue hallado el 5 de junio y se estableció que la causa de muerte fue asfixia, ocurrida entre el 1 y 2 de junio. Ante estos hechos, la Fiscalía General de Michoacán inició una carpeta de investigación por el delito de feminicidio. Días después, el cuerpo de Mireya fue depositado en una fosa común.
La familia de Mireya se enteró semanas después, a través de una publicación en redes sociales, que en Michoacán había sido localizado un cuerpo con la ropa y características coincidentes con las de la joven desaparecida.
A partir de ese momento, iniciaron un proceso para recuperar su cuerpo. Aunque desde el 19 de junio tenían la certeza de que se trataba de Mireya, fue necesario realizar pruebas de ADN para confirmar la identidad.
"Agradecemos a las autoridades de Michoacán, a los medios que nos apoyaron y a toda la gente que compartió para que yo pudiera encontrarla. Pero, lo que quiero, ahora, es justicia por la muerte de mi hermana", expresó Marisol Pérez, hermana de la joven, conmovida.
Finalmente, el pasado 11 de julio, la familia logró recuperar el cuerpo de Mireya. La misa de cuerpo presente se llevó cabo el viernes 12 de julio a las 9:00 de la mañana en Santiago Tautla.
A pesar de este avance, los familiares de Mireya señalaron que aún no hay sospechosos ni detenidos por el feminicidio de la joven, quien salió de su casa para ir a trabajar y nunca regresó. La familia continúa exigiendo justicia y la detención de los responsables.
