La comunidad de San Nicolás se prepara desde varias semanas antes para su fiesta patronal en honor a San Nicolás Tolentino.
La celebración comenzó el pasado 1 de septiembre y concluirá el próximo 11 de ese mismo mes. Entre las actividades más relevantes que tienen es la bendición y repartición del atole y tamales, lo cual se realiza el 10 de septiembre.
Desde julio las familias se preparan con la molienda de cacao, que es con lo que hacen el atole, siendo todo un rito, primero van en procesión a la iglesia por la imagen de San Nicolás Tolentino, y lo llevan a la casa donde se hará la molienda. En la actividad participan decenas de hombres y mujeres, en la molienda se sacan “gorditas” de cacao que se guardan para el atole.
Otra de las actividades representativas es la preparación del “charape” que es otra de las ofrendas que se le da al Santo Patrón. Consiste en un curado de pulque de varios sabores como guayaba, plátano o mamey.
De acuerdo con los lugareños, el ritual empieza con la recopilación del pulque en tambos de 200 litros, combinado con piloncillo. Las frutas y los granos son molidos artesanalmente en un metate junto con canela, al juntar gran cantidad, se coloca en los tambos en los que se concentra el pulque, se cuela con un ayate y se mezcla. Luego se deja fermentar y finalmente se reparte entre los presentes, actividad que se realiza cada 11 de septiembre.
Además de las actividades antes mencionadas, se realizan eventos deportivos, culturales y presentación de artistas durante la festividad.
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