Cesaron las muertes de ganado vacuno en el Valle de Tulancingo, informó Napoleón González, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural en Hidalgo (Saderh).
En entrevista para EL UNIVERSAL HIDALGO, el funcionario dio a conocer que, derivado de los resultados de laboratorio realizados por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), en donde se confirmó que el fallecimiento de los bovinos era a causa de la ingesta de pollinaza o gallinaza procesada, esta práctica se prohibió en Hidalgo para consumo de los animales.
Sin dar más detalles de las acciones que emprende su secretaría en el tema, por afirmar que existe veda electoral, Napoleón González solo se remitió a informar que fueron un total de 57 vacas las que se reportaron como muertas por alimento contaminado con la bacteria clostridium botulinum.
En febrero de este año, a través de chats de whatsapp se advirtió que el ganado vacuno mostraba un comportamiento inusual antes de morir repentinamente. Dichos mensajes fueron propagados de manera masiva hasta causar una incertidumbre en la población.
Después de una semana de haber surgido los rumores, autoridades estatales y federales iniciaron inspecciones para corroborar los hechos, en el que encontraron casos de muerte de ganado vacuno en Metepec y Tulancingo.
A mediados de febrero, la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COPRISEH) realizó operativo en 21 carnicerías y 33 centros de matanza, incluyendo el Rastro Municipal de Tulancingo, para detectar carne de dudosa procedencia.
El titular de Saderh, en su momento, dijo que los productores que informaron de la muerte de sus vacas afirmaron que compraron pollinaza en Veracruz, la cual se conoció posteriormente, no contaba con el tratamiento adecuado y causó la muerte del ganado.
Y se descartó que dichas muertes de bovinos se generaron por una enfermedad contagiosa o transmisible.