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Derivado de la intensa sequía que se registra en Hidalgo este año, en el distrito 003 de riego, con cabecera en Tula, se han perdido, en promedio, ocho mil 600 hectáreas de diferentes cultivos.
Las pérdidas representan cerca del 15 por ciento del total de la superficie que comprenden 56 mil hectáreas.
La falta de agua también causó merma en la producción del resto de las parcelas que cultivan maíz, alfalfa, frijol ejotero, frijol de grano y calabaza. El labriego cuantifica que, entre el 35 y el 40 por ciento de los cultivos se han perdido parcialmente.
Ante este panorama, no queda más que recuperar lo que se pueda y pedir que la siguiente siembra sea mejor, expresó el campesino tulense, quien reconoció que si bien existe el Seguro Agrícola Catastrófico para poder acceder a él es complicado, porque no todos pueden cumplir con los requisitos.
En este tema, la convocatoria para recibir apoyo por parte del Seguro Agrícola Catastrófico 2022, señala que, en caso de sequía, para zona de riego, se otorgan tres mil 60 pesos, por hectáreas siniestrada, únicamente para cultivos de maíz y frijol.
Si bien ese recurso ayuda, no cubre ni la compra de la semilla. Un agricultor por cuatro hectáreas siniestradas podría recibir 12 mil 240 pesos por parte del Seguro Agrícola Catastróficos; sin embargo, la semilla para la siembra de maíz este año costó entre 25 y 30 mil pesos, y se suma la renta de maquinaria para preparación de la tierra y el cultivo.
Este 2023 es el peor año de sequía en los últimos 25, confirman tanto autoridades de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y campesinos del distrito.
José Ángel Félix Sánchez, director local de la Conagua, asegura que, la dependencia federal atiende la problemática, pero es uno de los años más secos que se registran en la entidad.
