El solsticio de invierno es más que un fenómeno natural donde se vive la noche más larga del año y el día con la menor luz solar. Y este evento se puede observar desde un punto en Tulancingo, descubierto hace once años: Huapalcalco.
El doctor en estudios mesoamericanos Francisco Granados, al visitar Tulancingo en el 2012, explicó que para estudiar las configuraciones astronómicas de los santuarios antepasados la ciencia actual utiliza por herramienta algo llamado: Calendario de horizonte; en el caso de Huapalcalco, es la sierra de Las Navajas.
En entrevista para EL UNIVERSAL HIDALGO, Alejandro Aldana Barragán, de Niebla y Tiempo A.C, dio a conocer que desde hace once años, la organización mantiene viva la memoria del hallazgo.
"Asistimos a la puesta del sol en el solsticio de invierno, hacemos invitación abierta al público en general y Monserrat Barragán Andrade, narra el mito del nacimiento de Huitzilopochtli para compartir la trascendencia del fenómeno", expuso.
Destacó que el doctor Francisco Granados visitó Huapalcalco, en tres ocasiones, para corroborar el acontecimiento y buscar otras alineaciones. Desafortunadamente, una investigación completa para estudiar el calendario de horizonte de Huapalcalco, requiere un tratamiento con las formalidades que la academia necesita, por lo le toca al Instituto de Antropología e Historia (INAH) realizar lo correspondiente en materia de investigación.
"Los santuarios antiguos, construidos por los antepasados en México, tienen relación con el cosmos. Dicho con otras palabras, para los incrédulos, los espacios arqueológicos en nuestro país tienen orientaciones astronómicas", finalizó.