Siempre ha habido más críticas que propuestas en los debates. Que si la una mintió, que si la otra también, que si la corrupción, que si en el pasado... Fue el show para darle la ciudadanía más información y decida a quien le va a dar su voto.
La cosa es que el primer debate presidencial de estas elecciones, el pasado domingo 7 despertó mucho interés y al mismo tiempo controversia, al haber por primera vez dos mujeres en la contienda para la Presidencia de la República.
Claro, al terminar el debate el equipo de cada una de las candidaturas anunció que ganó. Es decir, tanto Sheinbaum y Gálvez, a decir de su gente, ganaron. Mostraron encuestas de medios de comunicación y de la iniciativa privada, en redes sociales, con altos porcentajes a favor y en contra las cifras de la contrincante.
Pero la gente tiene su propia opinión. ¿Cómo por un lado pudo ganar una y por el otro la otra persona? ¡Claro que no!
En el debate presidencial hubo de todo, incluso hasta la audiencia buscó lo picosito, saberle más cosas a cada quien. Cosas que permanecen escondidas, o en lo oscurito, o que no se atrevían a mencionar. Principalmente cuentas propias, empresas o programas que captaron más recursos que lo anunciado. En fin.
Y luego Sheinbaum, Gálvez y Máynez se inconformaron de las fallas del reloj, los errores técnicos y de cámara, del INE. Por cierto, ya el Instituto Nacional Electoral aceptó que se equivocó, pero mostró que hubo equidad en los tiempos.
Claudia Sheinbaum: Acudió con traje sastre color guinda, blusa de manga larga y cuello alto blanco, zapatillas altas color camel. Sonrisa tímida, gestos con las manos para marcar un dicho. El cabello recogido hacia atrás en una cola de caballo, tal como ha promovido su imagen. Tal vez un poco adusta, y sin responder a los comentarios de Gálvez.
Xóchitl Gálvez: Acudió con traje sastre blanco y una blusa blanca bordada, zapatos de tacón, pulsera, reloj, y un Rosario que, dijo le dio el Papa. Sonriente, con miradas de reojo, cabello suelto lacio casi al hombro, a veces nerviosa y otras provocando con palabras.
Jorge Álvarez Máynez: Acudió con traje sastre azul, camisa blanca, sin corbata, zapatos oscuros y dientes muy blancos. La mayor parte del tiempo, sonriente, incluso mandó un mensaje con lenguaje de señas, tranquilo, sonriente, como que, del lado de Claudia, ah, y sonriente.
Hubo verdades, mentiras, propuestas sin mucho sentido. Hubo memes durante y después del debate presidencial. Incluso hubo quien dijo “no vi el debate, pero sí un meme”.
La audiencia los va conociendo un poco más.
La cola de caballo de Claudia. La sonrisa de Máynez. La bandera de cabeza de Xóchitl.
Lo cierto es que… son estas tres propuestas las que compiten por la Presidencia de la República. Sólo estas tres. Véalas bien y decida. No hay más. Esperemos el siguiente debate a finales de este mes.
X@ÅidaSuarezCh
