¿Te imaginas tener una “green card mexicana” que permita realizar cualquier trámite desde tu celular, sin hacer filas, sin perder tiempo y sin entregar el mismo papel una y otra vez? es la promesa del Expediente Digital Ciudadano, una pieza clave de la nueva transformación digital del Estado mexicano, vinculado a Llave MX, una identidad digital segura, esta herramienta pone fin a la era de los traslados inútiles y abre paso a una gestión pública donde los documentos viajan, no las personas, incluso se garantiza que quienes no tengan acceso a internet sigan con ventanillas físicas, pero ahora con procesos ágiles, homologados y sin vueltas innecesarias, una revolución en la forma en que el gobierno se relaciona con su gente.
La Ley Nacional para Eliminar Trámites Burocráticos y Corrupción, es una transformación profunda que busca derribar los muros de la burocracia, dignificar el tiempo del ciudadano y abrir paso a un gobierno verdaderamente moderno, digital y transparente.
El exceso de trámites y requisitos de la gestión pública es un laberinto cotidiano; una persona en México realiza más de 486 trámites a lo largo de su vida, y el 85% de ellos son estatales o municipales, esta realidad genera pérdida de tiempo, frustración, espacios de discrecionalidad, corrupción e inequidad, la nueva ley parte de dos principios contundentes menos trámites y más justicia administrativa.
Hay reforma constitucional de los artículos 25 y 73 y se abroga la Ley General de Mejora Regulatoria, se construye un nuevo marco legal de aplicación obligatoria en los tres órdenes de gobierno, su meta es clara, reducir a la mitad los trámites, requisitos y tiempos de resolución; y digitalizar al menos el 80% de todos los procesos administrativos, una revolución operativa que pone al ciudadano al centro.
Para lograrlo, se plantea que exista una sola autoridad encargada de la simplificación y digitalización en cada nivel de gobierno, se eliminan vacíos normativos y obstáculos operativos, la autoridad operará bajo principios como la interoperabilidad, la digitalización efectiva y la validez jurídica de los documentos electrónicos, si una dependencia del Estado ya cuenta con un documento, no podrá volver a exigirlo, además, se homologarán vigencias entre trámites relacionados para evitar duplicidades y confusiones.
Una innovación trascendental es el Catálogo Único de Trámites y Servicios, que es guía estandarizada de los requisitos, procedimientos y plazos, alojado en el nuevo Portal Único Ciudadano, donde cualquier persona podrá consultar sus derechos y obligaciones de forma clara y accesible, y no solo eso, se pondrá en marcha un Sistema Nacional de Atención Ciudadana para acompañar, orientar y resolver dudas con profesionalismo.
En materia de tecnología, la reforma propone un cambio estructural: fortalecer la infraestructura digital pública como una política de Estado, así nace el Centro Nacional de Tecnología Pública, un organismo que proporcionará herramientas tecnológicas de código abierto sin costo para estados y municipios, se garantiza el acceso equitativo a la innovación, junto a él, la Escuela Pública de Código capacitará a servidores públicos en programación, telemática y nube pública, desarrollando capacidades técnicas propias.
Uno de los ejemplos más concretos de esta visión tecnológica es la Ventanilla Digital Nacional de Inversiones, actualmente, para abrir una empresa en México se requieren hasta 51 trámites con 466 requisitos, lo que implica un camino engorroso y costoso, la Ventanilla Digital Nacional simplifica el proceso, reduciendo los trámites a solo 17 y los requisitos a 127, todos disponibles en línea, con reglas claras y tiempos homogéneos en cualquier lugar del país, la plataforma unifica los trámites federales, estatales y municipales en un solo sitio, facilitando la constitución, construcción y operación de negocios, lo que impacta directamente en la competitividad y atracción de inversiones.
La plataforma incluye un expediente digital que permite cargar los documentos una sola vez y reutilizarlos para múltiples trámites, además, se instalan comités de seguimiento con empresas y autoridades para identificar cuellos de botella e integrar trámites prioritarios, con mesas de trabajo activas en más de 30 estados y municipios.
En esta dinámica, la Contraloría, logra avances notables en la digitalización de sus servicios, hoy cuenta con 19 trámites completamente virtuales, desde la recepción de denuncias ciudadanas hasta la gestión de inconformidades administrativas, uno de los servicios más solicitados, la Constancia de No Inhabilitación, tramitado más de 87 mil veces en línea, gracias a una plataforma que permite obtenerla desde cualquier dispositivo con conexión a internet, como parte de su política de sustentabilidad, se eliminó la impresión obligatoria de los acuses de las declaraciones patrimoniales, como parte de la iniciativa “cero papel”, reduciendo significativamente el impacto ambiental de los procesos administrativos.
Es momento de actuar como dice el gobernador con visión de futuro y trabajar con altura de miras, contamos con un sólido andamiaje legal y tecnológico que nos exige estar a la altura de sus alcances: la Ley de Adquisiciones y de Obra Pública con su respectiva Plataforma de Contrataciones; la Ley de Transparencia respaldada por la Plataforma Digital Nacional; y la Ley de Simplificación Administrativa, que impulsa la Ventanilla Digital Nacional, todas estas herramientas son vehículos hacia objetivos más elevados y trascendentales.
Bajo esta lógica, el Gobierno de Hidalgo avanza con paso firme hacia la construcción de una administración pública del siglo XXI, con la creación de los primeros Edificios Inteligentes: Anticorrupción que ya son una realidad tangible, y el próximo lanzamiento de las Torres Administrativas, que se convertirán en el gran cerebro del gobierno, un ecosistema de eficiencia, legalidad y transparencia, sostenido por el marco normativo más moderno del país.
Hoy, México tiene la oportunidad histórica de dejar atrás viejas prácticas para abrazar una nueva era de eficiencia, legalidad y cercanía con la ciudadanía. Con Claudia al frente del país y Julio conduciendo con firmeza los destinos del estado, se fortalece una alianza que garantiza la implementación de las reformas y proyecta un futuro ambicioso, innovador y justo. Con Claudia y Julio trabajando de la mano, Hidalgo será potencia. la nueva transformación digital del Estado mexicano, vinculado a Llave MX, una identidad digital segura, esta herramienta pone fin a la era de los traslados inútiles y abre paso a una gestión pública donde los documentos viajan, no las personas, incluso se garantiza que quienes no tengan acceso a internet sigan con ventanillas físicas, pero ahora con procesos ágiles, homologados y sin vueltas innecesarias, una revolución en la forma en que el gobierno se relaciona con su gente.
La Ley Nacional para Eliminar Trámites Burocráticos y Corrupción, es una transformación profunda que busca derribar los muros de la burocracia, dignificar el tiempo del ciudadano y abrir paso a un gobierno verdaderamente moderno, digital y transparente.
El exceso de trámites y requisitos de la gestión pública es un laberinto cotidiano; una persona en México realiza más de 486 trámites a lo largo de su vida, y el 85% de ellos son estatales o municipales, esta realidad genera pérdida de tiempo, frustración, espacios de discrecionalidad, corrupción e inequidad, la nueva ley parte de dos principios contundentes menos trámites y más justicia administrativa.
Hay reforma constitucional de los artículos 25 y 73 y se abroga la Ley General de Mejora Regulatoria, se construye un nuevo marco legal de aplicación obligatoria en los tres órdenes de gobierno, su meta es clara, reducir a la mitad los trámites, requisitos y tiempos de resolución; y digitalizar al menos el 80% de todos los procesos administrativos, una revolución operativa que pone al ciudadano al centro.
Para lograrlo, se plantea que exista una sola autoridad encargada de la simplificación y digitalización en cada nivel de gobierno, se eliminan vacíos normativos y obstáculos operativos, la autoridad operará bajo principios como la interoperabilidad, la digitalización efectiva y la validez jurídica de los documentos electrónicos, si una dependencia del Estado ya cuenta con un documento, no podrá volver a exigirlo, además, se homologarán vigencias entre trámites relacionados para evitar duplicidades y confusiones.
Una innovación trascendental es el Catálogo Único de Trámites y Servicios, que es guía estandarizada de los requisitos, procedimientos y plazos, alojado en el nuevo Portal Único Ciudadano, donde cualquier persona podrá consultar sus derechos y obligaciones de forma clara y accesible, y no solo eso, se pondrá en marcha un Sistema Nacional de Atención Ciudadana para acompañar, orientar y resolver dudas con profesionalismo.
En materia de tecnología, la reforma propone un cambio estructural: fortalecer la infraestructura digital pública como una política de Estado, así nace el Centro Nacional de Tecnología Pública, un organismo que proporcionará herramientas tecnológicas de código abierto sin costo para estados y municipios, se garantiza el acceso equitativo a la innovación, junto a él, la Escuela Pública de Código capacitará a servidores públicos en programación, telemática y nube pública, desarrollando capacidades técnicas propias.
Uno de los ejemplos más concretos de esta visión tecnológica es la Ventanilla Digital Nacional de Inversiones, actualmente, para abrir una empresa en México se requieren hasta 51 trámites con 466 requisitos, lo que implica un camino engorroso y costoso, la Ventanilla Digital Nacional simplifica el proceso, reduciendo los trámites a solo 17 y los requisitos a 127, todos disponibles en línea, con reglas claras y tiempos homogéneos en cualquier lugar del país, la plataforma unifica los trámites federales, estatales y municipales en un solo sitio, facilitando la constitución, construcción y operación de negocios, lo que impacta directamente en la competitividad y atracción de inversiones.
La plataforma incluye un expediente digital que permite cargar los documentos una sola vez y reutilizarlos para múltiples trámites, además, se instalan comités de seguimiento con empresas y autoridades para identificar cuellos de botella e integrar trámites prioritarios, con mesas de trabajo activas en más de 30 estados y municipios.
En esta dinámica, la Contraloría, logra avances notables en la digitalización de sus servicios, hoy cuenta con 19 trámites completamente virtuales, desde la recepción de denuncias ciudadanas hasta la gestión de inconformidades administrativas, uno de los servicios más solicitados, la Constancia de No Inhabilitación, tramitado más de 87 mil veces en línea, gracias a una plataforma que permite obtenerla desde cualquier dispositivo con conexión a internet, como parte de su política de sustentabilidad, se eliminó la impresión obligatoria de los acuses de las declaraciones patrimoniales, como parte de la iniciativa “cero papel”, reduciendo significativamente el impacto ambiental de los procesos administrativos.
Es momento de actuar como dice el gobernador con visión de futuro y trabajar con altura de miras, contamos con un sólido andamiaje legal y tecnológico que nos exige estar a la altura de sus alcances: la Ley de Adquisiciones y de Obra Pública con su respectiva Plataforma de Contrataciones; la Ley de Transparencia respaldada por la Plataforma Digital Nacional; y la Ley de Simplificación Administrativa, que impulsa la Ventanilla Digital Nacional, todas estas herramientas son vehículos hacia objetivos más elevados y trascendentales.
Bajo esta lógica, el Gobierno de Hidalgo avanza con paso firme hacia la construcción de una administración pública del siglo XXI, con la creación de los primeros Edificios Inteligentes: Anticorrupción que ya son una realidad tangible, y el próximo lanzamiento de las Torres Administrativas, que se convertirán en el gran cerebro del gobierno, un ecosistema de eficiencia, legalidad y transparencia, sostenido por el marco normativo más moderno del país.
Hoy, México tiene la oportunidad histórica de dejar atrás viejas prácticas para abrazar una nueva era de eficiencia, legalidad y cercanía con la ciudadanía. Con Claudia al frente del país y Julio conduciendo con firmeza los destinos del estado, se fortalece una alianza que garantiza la implementación de las reformas y proyecta un futuro ambicioso, innovador y justo. Con Claudia y Julio trabajando de la mano, Hidalgo será potencia.