Frecuentemente escuchamos anuncios de inversiones en México, tanto de empresas nacionales como extranjeras, con lo cual las empresas crecen sus operaciones o traen nuevos insumos al país para ensamble, producción, distribución o venta. Es decir, estamos viviendo una reorganización industrial global y México se está viendo beneficiado con este reordenamiento. Por su parte, el Banco de México estima que el país va a crecer en un 2.8% del producto interno bruto en 2024.
A pesar de los éxitos en la atracción de inversiones extranjeras y nacionales, junto con el pronóstico de crecimiento del Banco de México (que si bien es muy bueno y en sí mismo refleja un gran esfuerzo de los mexicanos), esto no será suficiente para brindar bienestar a todos por igual debido a muchos otros factores. Es prioritario buscar mayor bienestar para toda la población y, para lo anterior, se estima que deberíamos crecer al menos a un ritmo del 5 por ciento anual.
La pregunta entonces es ¿cómo podemos lograr un crecimiento a esos niveles?, ¿qué países lo han logrado?, ¿cómo lo lograron? Considero que los países que han conseguido crecer a ritmos superiores al 5% anual son aquellos que han tenido la capacidad de hacer que sus empresas, sociedad y gobiernos se pongan de acuerdo para trabajar juntos hacia el mismo objetivo de crecer.
En las últimas semanas y, derivado del proceso electoral en el que estamos sumergidos, se comienza a poner el tema sobre la mesa y se escuchan diversas voces sobre cómo podremos lograr crecer al 5 por ciento anual.
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE), el órgano máximo representante del sector privado, con el fin de aprovechar esta reorganización industrial llamada nearshoring, presentó un catálogo de 14 puntos y acciones que estiman podrían aumentar el ritmo de crecimiento al 5 por ciento anual. En su fórmula, el CCE también aborda la necesidad de aumentar inversiones en infraestructura, buscar una transformación digital y el desarrollo sustentable del país.
Una vez terminadas las elecciones, varios de estos temas nos pondrán a prueba como sociedad y veremos si es posible ponernos de acuerdo, pongamos como ejemplo todo lo relacionado al desarrollo de talento y a la atracción de inversiones de nearshoring. Muchos de estos temas son complejos y cuando los países intentan abordarlos se generan muchos puntos de vista y estas discusiones ponen a prueba a sus sociedades. ¿En México tendremos la capacidad de ponernos de acuerdo?