Como se inicia:
Comentarios en la sierra y Huasteca de Hidalgo: Existía mucha nerviosidad en el ambiente político; el 20 de febrero se instaló la presunta legislatura “vargasluguista” en el teatro Bartolomé de Medina, y la presunta legislatura “parrista” en la casa número 16 de las calles de Allende, en Pachuca.
Estaban a la expectativa, esperaban el fallo de Gobernación. Este llegó cinco días después confirmando el triunfo del Ingeniero y compañeros de fórmula. Tomaron posesión los diputados vargasluguistas, integrando la XXX Legislatura local. Ante ella el 1° de marzo, el coronel Matías Rodríguez rindió su último informe de gobierno. El 7 del mismo mes, el cuerpo colegiado, expidió el decreto mediante el cual declaró Gobernador del Estado por el período del 1° de abril de 1929 al 31 de marzo de 1933 al Ing. Bartolomé Vargas Lugo.
Realmente Vargas Lugo era un hombre de paz y las circunstancias políticas lo habían obligado a luchar vigorosamente en contra de Parres.
Tan pronto como fue declarado Gobernador, lanzó un manifiesto al Estado, en el que pedía el olvido de odios y apasionamientos políticos, prometiendo trabajar por el bienestar de los hidalguenses y dar amplia libertad de expresión a la prensa.
(Dos momentos en la vida de esta región tomados del libro Los quince mil días, escrito por del exgobernador de Hidalgo, Profesor Donaciano Serna Leal …)
El domingo 10 de abril, ante la XXX Legislatura, presidida por el señor José Lugo Guerrero, protestó el Ing. Vargas Lugo, como gobernador de Hidalgo. Nueve días después, El Observador periódico de Pachuca, anunciaba a ocho columnas: "Habrá. ... al fin, nueva carretera a Huejutla". Y la hubo con el gobierno del Lic. Manuel Sánchez Vite.
La inauguración:
No obstante, el frío, la niebla y la lluvia, las multitudes congregadas en este importantísimo acto se agrupaban alrededor del presidente y su comitiva, con el fin de no perder ni una de las palabras pronunciadas, de atender todos los detalles. Miles y miles de serranos y huastecos habían dejado sus pueblos y sus rancherías para ser testigos de esta grandiosa escena, cuyo acto primero se inició hace cuarenta y dos años. Antes de sentarse para presidir el programa, el jefe de la Nación se dirigió al monumento construido exprofeso para develar la placa que señalaría a propios y extraños, una fecha memorable.
Con mano firme, tiró del cordón y corrió la leve cortinita, apareciendo a la vista
