Iban “directamente” por ella, informaron autoridades de Jalisco. La alcaldesa de Cotija, Michoacán, Yolanda Sánchez Figueroa fue privada de la libertad la noche del sábado, por un grupo armado, poco después de salir del centro comercial de Zapopan, Jalisco –Plaza Antares– al que había ido de compras con dos miembros de su familia.

Según información recabada en videos del C5, así como en cámaras particulares, la alcaldesa de Cotija fue interceptada en el cruce de dos transitadas avenidas por los tripulantes de un vehículo al que acompañaba un grupo de motocicletas.

La obligaron a bajar del taxi que ocupaba y la subieron por la fuerza a la unidad. Los hombres que se la llevaron, presuntamente del Cártel Jalisco Nueva Generación, permitieron la huida de una de sus acompañantes; a la otra, se informó, la “aventaron” en un parque cercano a la avenida Vallarta.

Hace cinco meses, la alcaldesa solicitó una licencia temporal al Cabildo municipal. Le otorgaron una de 60 días, para que pudiera atenderse, según se dijo, “de un problema de salud”.

El 17 de abril hubo un escándalo en Cotija de la Paz. Civiles armados y presuntos elementos de la Guardia Civil arribaron a la cabecera municipal en vehículos blindados con siglas del Cártel Jalisco y camionetas “balizadas como patrullas”.

Desarmaron a una decena de policías municipales, les quitaron equipos y radios y encararon a las puertas del palacio municipal a la alcaldesa Sánchez Figueroa y al secretario de seguridad pública Leo Báez.

Según el relato de uno de los policías desarmados, los recién llegados dijeron que arribaban para hacerse cargo de la seguridad pública del municipio por órdenes del secretario de seguridad estatal, José Alfredo Ortega Reyes.

El uniformado informó que le habían pasado un teléfono celular a la alcaldesa, y que a través del manos libres se escuchó la voz de un hombre que se identificó como integrante del Cártel Jalisco Nueva Generación, quien comenzó a impartir instrucciones a la funcionaria.

“Le decían que de inmediato quitara al director de Seguridad Pública municipal y que ellos traían la consigna de poner a otro”, según informó EL UNIVERSAL.

La comandancia municipal había sido atacada unos días antes por un convoy compuesto por varios hombres armados. Dos uniformados perdieron la vida.

Tras la llamada telefónica realizada a la alcaldesa Sánchez Figueroa por un mando del CJNG, el secretario de seguridad estatal se presentó en el municipio y le tomó protesta a Orlando Nava Badillo como nuevo director de seguridad pública municipal, en lugar del que se hallaba en funciones.

Estalló un nuevo escándalo: autoridades municipales consideraron que el nombramiento era ilegal y violaba la Constitución. Nava Badillo se fue de Cotija dos días después y Leo Báez retomó el cargo.

El secretario estatal había alegado que quien iba al frente de los 60 hombres que el 17 de abril irrumpieron en Cotija era un individuo que un día antes había renunciado a la dirección de seguridad pública de Coajumatlán de Régules.

La amenaza en contra de la alcaldesa estaba latente desde entonces. Ayer, el gobernador del estado, Alfredo Ramírez Bedolla, arguyó, sin embargo, que ella nunca había pedido medidas de seguridad. Y por lo tanto, no se le habían dado escoltas.

Yolanda Sánchez Figueroa fue la primera mujer que se convirtió en alcaldesa de Cotija. Llegó envuelta en una nube de euforia, tras unas elecciones operadas por grupos del crimen organizado, sobre todo en la Tierra Caliente de Michoacán.

Fuentes estatales señalan que su candidatura fue “aprobada” por la confederación criminal conocida como Cárteles Unidos, de la que forman parte Los Viagras. Diversos reportes indican que desde esa fecha, julio de 2021, se fue volviendo más violenta la ofensiva del Cártel Jalisco para apoderarse del municipio. Durante el último año los enfrentamientos contra militares, municipales y guardias nacionales, arreciaron. Hace unos meses fue quemado por el Ejército un campo de entrenamiento de uno de estos grupos, en el que 6 costales de mariguana, así como equipo táctico, fueron encontrados.

Con frecuencia, pobladores del municipio han subido a redes imágenes de persecuciones y enfrentamientos ocurridos en Cotija a plena luz del día. El 11 de julio, Cotija fue nombrado pueblo mágico. La alcaldesa acababa de denunciar que la actividad económica se había desplomado en un 60%.

Los ataques y amenazas contra pobladores no cesan. El secretario general del PAN, Javier Estrada Cárdenas, declaró ayer que la alcaldesa Sánchez Figueroa había confesado “que se sentía agobiada por el crimen organizado”.

Nada explica mejor la situación de Michoacán que este hecho: supieron que había salido del estado, supieron exactamente dónde y a qué hora localizarla, y luego fueron “directamente” por ella.

Hasta ayer en la noche había algunos indicios de la ruta que habían tomado sus captores. Pero no se sabía aún nada sobre ella.