Fundado el 1 de octubre de 1916, El Universal nació en un momento crucial para México, cuando el país se encontraba inmerso en los intensos cambios sociales, políticos y económicos que trajo consigo el estallido de la Revolución Mexicana. El periódico se estableció en un contexto donde la necesidad de contar con información veraz y accesible, (que pudiera informar sobre los acontecimientos cruciales de su tiempo), era vital para la ciudadanía.
Con el objetivo de ofrecer un espacio para el debate y la difusión de ideas, su fundador el ingeniero Félix Fulgencio Palavicini, (quien formaba parte del Congreso Constituyente de Querétaro), logró establecer un periódico que se convirtió en un referente en la prensa nacional, cuyo enfoque editorial ayudó a cimentar su reputación como defensor de la libertad de expresión.
El Congreso Constituyente, convocado en 1916, fue un hito fundamental en la historia de México. Este evento reunió a representantes de diversas facciones revolucionarias para discutir y redactar una nueva constitución que reflejara los ideales de la Revolución. En sus deliberaciones, se abordaron temas cruciales como la reforma agraria, los derechos laborales, la educación laica y la soberanía nacional. El resultado de estas discusiones fue la Constitución de 1917, que estableció un marco legal que buscaba garantizar derechos y libertades fundamentales, convirtiéndose en un documento emblemático de la lucha social.
Durante la Revolución, los ideales de justicia social, democracia y derechos humanos comenzaron a tomar forma, y El Universal se erigió como un vehículo fundamental para dar voz a estos anhelos. La cobertura del periódico durante este periodo fue particularmente relevante, además de convertirse en pionero y precursor en el uso de tecnologías de impresión y distribución, contribuyendo de manera significativa al crecimiento y la modernización de la prensa en México.
La importancia de El Universal no se limitó a informar sobre los acontecimientos políticos, sino que permitió articular y difundir los ideales que emergieron de la Revolución. Además, sus páginas sirvieron como un foro para debatir, convirtiéndose en un espacio donde las voces de los distintos sectores de la sociedad podían ser escuchadas.
A lo largo de su historia del país, El Universal ha mantenido su compromiso con el periodismo crítico, adaptándose a los cambios del entorno político, cultural y social; por lo que, en la actualidad, continúa siendo un pilar del periodismo en México, ofreciendo una plataforma para la discusión de temas cruciales que afectan a la sociedad. Asimismo, la evolución de la comunicación digital ha permitido que el periódico amplíe su alcance, llegando a nuevas audiencias y ofreciendo una cobertura más amplia e inmediata de los acontecimientos.
La historia de El Universal es, en gran medida, un reflejo de la historia de México en el último siglo. Su fundación y desarrollo a lo largo de los años son testimonio del poder del periodismo como un instrumento democratización de la información. A medida que el país avanza, el periódico sigue siendo un actor fundamental en el debate público, un recordatorio de la importancia de la libertad de expresión y del papel del periodismo en la búsqueda de la imparcialidad.
El Universal no solo ha fungido como un medio de comunicación; ha sido un testigo y un participante activo en la historia de México. Desde sus inicios, ha dado voz a las aspiraciones y exigencias del pueblo mexicano, manteniendo viva la memoria, los valores e ideales que lo inspiraron.
La historia de El Universal es, en gran medida, un reflejo de la historia de México en el último siglo.