El pleno de la aprobó en lo general la reforma al artículo segundo de la Constitución, en materia de pueblos y comunidades indígenas y afromexicanos.

Se avaló por unanimidad de 492 votos a favor, pero con reclamos por parte de la oposición quienes recriminaron falta de presupuesto para implementar la reforma, y acusaciones de visión clientelar en el nuevo texto constitucional.

Durante el debate del proyecto, el diputado de Movimiento Ciudadano, Gildardo Pérez Gabino dijo que este gobierno ha permanecido “totalmente ausente” ante los desplazamientos de los mixtecos y tlapanecos en el estado de Guerrero, “quienes ante la presencia del narcotráfico y la delincuencia organizada han tenido que ceder parte de sus zonas mineras”.

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Además, denunció que se ha colonizado la Constitución, a llamar afromexicanos a las personas de color: “¿Por qué nos llaman afromexicanos? Se tiene que quitar este prefijo Si nací en México y mis padres y abuelos nacieron en México, soy mexicano nada más, no afromexicano simple y llanamente soy mexicano. No pueden traer sus complejos racistas y clasistas para querernos diferenciar”

Del PAN, el diputado Asael Hernández cuestionó que la reforma se pretenda implementar sin impacto presupuestal: “Porque si bien la Secretaría de Hacienda afirmó que no habría impacto presupuestal para los ejecutores del gasto, el contrario el Centro de Estudios de Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados, cuestionó la viabilidad financiera de la iniciativa”.

En tanto, Genoveva Huerta Villegas, también del PAN, adelantó que su partido votaría a favor, pero consideró que “se queda mucho a deber”.

“Al iniciar este gobierno poco más de 10 millones padecían alguna carencia ya sea en educación, salud, vivienda, seguridad social, servicios básicos o de alimentación, cuatro años después la cantidad ha aumentado a más de 11 millones según datos del propio Coneval, entonces no solo no hemos saldado nuestra deuda, sino que ignorándola la hemos acrecentado destinándola a una pobreza mucho más cruel e inhumana”, expuso.

La diputada del PRI, Leticia Barrera Maldonado dijo que el tricolor apoyaría la reforma “porque como oposición nos pronunciamos por apoyar con responsabilidad todo lo que beneficia a la gente”.

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Ricardo Monreal celebra la aprobación de la reforma en materia de comunidades indígenas y afroamericanas. Foto: Diego Simón/EL UNIVERSAL

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José Alejandro López Sánchez del PT, dijo que la reforma “permitirá que nuestros pueblos recobren la grandeza que tuvieron antes de la conquista española”; Iván Marín Rangel, del PVEM, celebró que la propuesta reconozca a la medicina tradicional y consideró que “se trata de una histórica reforma que nos permitirá restablecer la deuda que tenemos con nuestros pueblos indígenas y afromexicanos”, en tanto que Irma Juan Carlos calificó este miércoles como “un día histórico”.

“Un día histórico que quedará grabado en nuestras mentes y corazones como el momento en que después de más de cinco siglos de invasión, despojo, exclusión, racismo y discriminación, por fin se van a reconocer nuestros derechos inalienables en la constitución”, concluyó.

Dicha reforma reconoce los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos a ser consultados ante cualquier reforma legislativa o cualquier política pública que se instrumente, y establece que dichas comunidades tendrán derecho a definir el uso de los recursos públicos que les sean destinados mediante consulta popular, y tendrán derecho a operar y administrar sus propios medios de comunicación, de radiodifusión, de telecomunicaciones.

También establece que se trabajará para garantizar el acceso a Internet de banda ancha en comunidades y pueblos indígenas y afromexicanos.

Tras su aprobación en lo general, se procedió al debate en lo particular.

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